Flor / Flower

Intervención en jardín 
Casona de los Olivera
Buenos Aires, 2002 
Goma eva
Colaboración: Richi Soto, Diego Mur 

Realicé esta escultura en el marco de la muestra “Naturaleza Artificial” del año 2002 en el espacio de arte de la Casona de los Olivera, en la ciudad de Buenos Aires. Este espacio funciona en una antigua mansión colonial de lo que fuera la finca de fin de semana de una familia tradicional argentina. Hay un inmenso parque público; la casa tiene un jardín más pequeño, rodeado por una reja.
Esta escultura, de 6 metros de diámetro, esta realizada en goma eva, trabajada en módulos geométricos repetidos cientos de veces. Los módulos tienen una suerte de “aletas” que se mueven con el viento y la combinación de colores define la forma de una flor gigante.
Encontré interesante el contraste del material sintético con la vegetación, la incongruencia de la escala, la imagen fantástica.
Luego la naturaleza dejó clara su potencia y su infinitud. El sol destiñó los colores; el césped creció dentro de la obra, más y más, hasta que la fagocitó y la escultura casi desapareció.
Todo lugar intervenido produce una reacción, cualquiera sea, y también una extraña relación de poder. 

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I made this sculpture for the “2002 - Artificial Nature” show at the art space at “Casona de los Olivera” in Buenos Aires. This is a historic colonial weekend house owned by a traditional Argentinean family, turned into a community cultural center. It is located in the center of a large public park; the house has a small fenced garden.
This sculpture, 6 meters diameter, was done in EVA foam, structured in equal geometrical modules, by the hundreds, like a permanent pattern. Those modules had some kind of blades that moved with the wind, the color palette – red, pink and rose – defined the shape of a giant flower.
I found the contrast between the synthetic material and nature, the incongruence of the scale, and the fantastic image trying to duplicate the natural structures very interesting. So the sculpture raised the opposition natural – artificial, in a synthetic simulation of a possible communion.
Then Nature showed its power and infinity. The sun discolored the shades, grass increasingly grew into the sculpture engulfing it, and the sculpture almost disappeared.
Finally, that incredible reaction of Nature, that changed it into a “living” installation, became the most interesting process that ever happened to any of my works. The power relations between Nature and art were clearly defined.